Hace mas de un siglo que un párroco inglés el Dr. Bach estableció los protocolos de las Flores terapéuticas que llevan su nombre. Gracias a la observación de la naturaleza y su gran intuición, fue capaz de describir los efectos que determinadas especies vegetales podían tener en la psique y emocionalidad de los animales. Animales humanos y no humanos. Se dice que los animales no humanos responden mucho mejor a los tratamientos pues no acarrean muchos de los prejuicios y limitaciones que nos impone, a veces, la racionalidad. Está muy bien comprobada, incluso científicamente, la eficacia de estas poderosas esencias que son cada vez mas populares. Sin ser la únicas pero si las pioneras, las flores de Bach seleccionadas y aplicadas correctamente son una ayuda importante en la adaptación a los cambios, el desánimo, la apatía, el deseo de aislamiento, etc.. Los gatos, son extremadamente sensibles y por ello requieren cuidados que estén a la altura de esa capacidad que a veces se torna en inconveniente. Con un respeto absoluto por la pautas veterinarias convencionales y sin interferir para nada, las Flores de Bach son un magnífico complemento terapéutico. Recientemente la terapeuta floral Maribel Garcia Rius visitó las instalaciones de Montsegat para afinar el tratamiento de unos gatos por los que se ha preocupado desde que supo de su existencia. Una fantástica colaboración que agradecen felinos y no felinos por que se muestra más que eficaz. Gracias desde aquí por tu desinteresada aportación.
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